Una responsabilidad común es luchar contra el cambio climático y proteger el medio ambiente desde todos los puntos de desarrollo económico, partiendo de este enfoque se puede proponer objetivos y criterios para que los restaurantes puedan ser sostenibles.
Se pretende crear conciencia en varios aspectos para que los platos, los servicios y las personas que son parte de los restaurantes cumplan la sana relación entre el ecosistema y su crecimiento económico; entre ellas están:
- No utilizar especies en peligro de extinción para la elaboración de sus platos.
- Se sugiere el uso de especies de pescado desatendidas, que no estén en periodo reproductivo, sean de ciclo corto y evitando pescados grandes.
- No consumir alimentos que contengan organismos genéticamente modificados.
- Se promueve una cocina saludable y sostenible, es decir sean alimentos del lugar, frescos, sin procesar, sin conservantes sintéticos, de temporada y orgánicos.
- Cumplir con estándares de calidad, limpieza y controles microbiológicos, controlando y evitando concentraciones de metales pesados, pesticidas y fertilizantes.
- Garantizar transparencia y trazabilidad frente a consumidores y clientes, generando constante comunicación por diferentes medios como sitios web, redes sociales, tarjetas, menús, carteles e intercambio personales.
- Promover la igualdad de condiciones de trabajo y género. Fomentar la capacitación de los empleados.
- Se promueve la reducción de uso de recursos como el agua y la energía y se implanta el uso de energías renovables y ecológicas, así también la reducción en la emisión de gases con el objetivo de preservar los recursos naturales.
- Se sugiere el uso de productos de limpieza biodegradables y ecológicos.
- Se promueve y se valora los restaurantes equipados con muebles sostenibles, elaborados con productos reciclados y locales.
- En relación a los desechos es preciso monitorear para reducirlos y si es posible reutilizarlos, además de realizar la clasificación de los mismos.
- Evitar el uso de envases de un solo uso.
Es un conjunto de actividades que permitirán ser amigables con el mundo, tomando conciencia en todos los ámbitos con lo que se consume, se cocina y se desecha.